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Apéndice A : Primer Caso Demostrativo
Apéndice B : Manuales y reimpresiones técnicas de la I.C.E útiles para los agentes de extensión agrícola
Apéndice C: Adiestramiento de extensión
Apéndice D : Bibliografía y recursos
Apéndice A : Primer Caso Demostrativo
Ana es una Voluntaria del Cuerpo de Paz quien ha sido entrenada en cuanto a las técnicas de la horticultura intensiva de vegetales. Llega para reemplazar a otro voluntario en la villa donde ha sido asignada. A los primeros dos o tres días, las autoridades locales, trabajadores agrícolas y gente del pueblo conducen una reunión para darle la bienvenida. Ana se presenta hablando sobre el lagar de donde vino, su interés en ayudar con la agricultura y su aprecio de la amistad y asistencia que todos le han brindado al ayudarla a establecerse en su casa. Pregunta los nombres de los líderes locales y escucha a cada uno decir un breve discurso.
Durante las siguientes semanas, Ana pasa la mayor parte de su tiempo aclimatándose al ambiente. Visita el pueblo con su contraparte oficial, Abdul, quien la presenta a los dueños de las tiendas y a los líderes religiosos, le muestra donde los artesanos locales practican su arte y le ayuda a hacer arreglos para la instrucción del lenguaje. Por las tardes, Ana pasa tiempo llenando un mapa con la información del día y visitando a sus vecinos.
Ana continúa su contacto inicial con los líderes de la villa pidiéndoles que comprometan un poco de su tiempo a pasarlo con ella en una tarea particular orientada hacia la agricultura. Le pide a un líder que le muestre su finca. Le pide a otro que le muestre dónde almacena sus cosechas y semillas. Le pide a otro más que la presente al "mejor" agricultor que conozca. De esta forma, Ana comienza a formar impresiones de qué líderes están activamente interesados y participando en la agricultura así como las prácticas agrícolas que usan las personas en el área.
Ana también toma dos días para viajar a la capital del distrito con Abdul para visitar la oficina del Ministerio de Agricultura. Durante su estadía, hace un esfuerzo especial para conocer a las secretarias de la oficina del Ministerio, al tendero, a los conductores y mecánicos, y al cajero porque se da cuenta de que estas personas tienen posiciones importantes y le pueden brindar servicios claves de apoyo en el campo. Se reúne una o dos horas cada día con su supervisor, discutiendo la percepción de los esfuerzos previos de desarrollo en su lugar. El supervisor revisa el trabajo de su predecesor que trabajó con los huertos vegetales en tres villas vecinas, y describe brevemente algunos de los proyectos del Ministerio que se están llevando a cabo en el área. Ana esta particularmente interesada en aprender sobre las pruebas en las fincas que se efectuaron recientemente en las variedades mejoradas de berenjenas, pimientos y cebollas. Ana aprende aspectos de los procedimientos de oficina, recibe una jira de las facilidades, y recibe las formas para sus informes mensuales.
Cuando Ana regresa a su lugar, los agricultores están recogiendo sus cosechas y están limpiando el terreno para los huertos vegetales de la temporada seca. Ana y Abdul deciden sembrar un huerto pequeño en un pedazo de tierra en la parte de atrás de su casa. Juntos limpian el terreno, y, a medida que trabajan, discuten largo y tendido sobre la, prácticas de la horticultura. Abdul le describe los métodos locales de cultivo. Ana le pide más información sobre las pruebas de variedades que él ayudó a efectuar el año anterior.
Una o dos veces a la semana, Ana se ofrece a ayudar a los agricultores con sus labores de siega. Aunque Ana no se siente muy cómoda al principio, poco a poco va mejorando en su manejo del guadañal que hicieron los herreros locales, y comienza a disfrutar al aprender a cargar cosas en la cabeza y a aprender los nombres locales de varias plantas e instrumentos.
A medida que se acerca la siega, se presta más atención en la comunidad a la siembra de la cosecha vegetal. Los agricultores tuvieron mucho éxito el año anterior, especialmente con las cebollas. Esto se debe en parte a las temperaturas relativamente más frescas en el lagar donde está Ana, el cuál está a una elevación más alta que gran parte del resto del país. Algunos agricultores no pudieron llevar al mercado parte del excedente de sus productos del año pasado y muchos están interesados en aumentar sus esfuerzos esta temporada.
El factor limitante más importante para expandir la producción es la disponibilidad de las semillas de cebollas, las cuáles se pueden multiplicar únicamente en un clima mucho más fresco. Los comerciantes traen la semilla al pueblo desde la ciudad capital, pero cobran un precio alto, exigiendo precios ano más altos cada vez. Ana escucha muchas quejas de sus vecinos. Les pregunta qué otras fuentes alternas de semillas están asequibles; nadie parece saber de alguna además de la ciudad capital. Ana discute la situación con Abdul, quien le dice que la semilla se puede comprar a través del ministerio, pero que conlleva un pedido especial del supervisor de Ana al igual que aviso por adelantado (varios meses) para que la semilla se pueda traer de fuera del país.
La cosecha de vegetales de la villa emerge y Ana y Abdul establecen un patrón bastante regular de visitas a los agricultores. Bajo recomendación de Abdul, enfocan la atención en los espacios de las plantitas jóvenes durante el trasplante y en las prácticas de desyerbar, las dos áreas en las que los agricultores en tenido la mayor dificultad en el pasado.
La cosecha de cebollas madura y, aunque hay algunas pérdidas debido a las plagas de insectos, la cosecha se ve bien. Las visitas regulares al campo y los prospectos de la siega han sido documentados en los informes que Ana le envía al Ministerio y. En una visita a la capital del distrito cerca del final de la temporada de cultivo, el supervisor de Ana menciona la cosecha de cebollas y pregunta si los informes son precisos, ya que la cosecha de cebollas va tan bien. Su interés hace que Ana tenga una idea, la que discute con Abdul esa tarde.
La idea de Ana es invitar a su supervisor y algunos otros trabajadores agrícolas en el distrito a que visiten su lugar para que observen la cosecha de cebollas durante la primera semana de cosecha. Esto le daría a los agricultores en su área una oportunidad para solicitar del Ministerio una compra especial de semillas para el año siguiente. Le daría también a Abdul la oportunidad de obtener algún reconocimiento por el buen trabajo que ha estado realizando si organizara la recepción para los invitados especiales.
A Abdul le gusta mucho la sugerencia de Ana. Los dos visitan a su supervisor al día siguiente para invitarle al pasadía. El supervisor acepta y se decide una fecha tentativa para dentro de tres semanas.
Cuando Ana y Abdul regresan a su lugar, visitan a uno de los líderes de la villa, quien cosecha cebollas, y le informan sobre los arreglos que han hecho con su supervisor. El líder se alegra de que se haya logrado algún contacto con el Ministerio de Agricultura sobre el problema en el pueblo con la compra de semillas, pero le dice a Ana y a Abdul que no se puede llevar a cabo el pasadía, lo que les decepciona mucho. En el día que se habla planeado se ha de llevar a cabo un servicio funeral conmemorativo. Los tres hablan un poco más, se llaman a algunos de los otros líderes para que se unan a la discusión, y se decide enviar a un mensajero a la capital de distrito para invitar al supervisor del Ministerio a que venga una semana más tarde de lo que se había acordado. El mensajero regresa a los dos días con las buenas noticias de que el supervisor de Ana podrá venir en la nueva fecha.
A este punto, la planificación se efectúa en tres niveles diferentes. Ana y Abdul se sientan y discuten cuáles han de ser sus objetivos para el pasadía. Escogen dos: impresionar a los oficiales del Ministerio con las necesidades de los agricultores en el lugar donde está Ana para tener mayor acceso a las semillas de cebollas; y demostrar los logros de Abdul como agente de extensión en el campo para aumentar sus prospectos para promoción dentro del Ministerio en el futuro. Para poder alcanzar estas metas, los dos trabajadores de extensión discuten el papel que cada uno ha de desempeñar durante el pasadía, y ennumeran varias preguntas que se le han de formular a los líderes de la villa para asegurar que el día pase sin problemas.
Se lleva a cabo una reunión entre Ana y Abdul y los líderes de la villa. Abdul señala que el oficial del Ministerio llegará por la mañana y que probablemente esté acompañado por otros trabajadores del Ministerio. La discusión se enfoca en quién ha de recibir al oficial a nombre del pueblo, lo que el oficial ha de observar durante su visita a los huertos de vegetales, qué provisiones especiales han de hacerse en cuanto a la comida y entretenimiento, y quién representará a los agricultores de cebollas para presentar su pedido de cebollas al oficial antes de que éste se vaya. Se prepara una lista de tareas y los líderes del pueblo deciden llamar a asamblea popular.
Esta reunión se lleva a cabo la tarde siguiente después de que todos han terminado su día de trabajo en el campo. Los líderes le informan a la gente del pueblo sobre la visita y dicen que las personas deberán limpiar las veredas que llevan a los campos, cocinar una comida especial, proveer entretenimiento y asistir a la reunión con el oficial para hablar sobre las compras de semillas de cebollas para el próximo año.
Al llegar el días señalado, Abdul y Ana hacen una revisión de última hora para asegurarse de que todas las preparaciones se han hecho. Su supervisor llega un poco más tarde de lo que ellos pensaban, y algunos de los agricultores estaban ya ansiosos. Sin embargo, el día procede como se habla planificado. Abdul, Ana y los líderes de la villa recibieron al oficial cuando llegó. Abdul y un par de los mejores agricultores de semilla le muestran al oficial varios de los huertos de cebollas. Se sirve una comida bien grande mientras los músicos tocan. Al final del día, los líderes del pueblo dicen un breve discurso elogiando a Abdul y a Ana por sus esfuerzos de extensión e informándole al supervisor del Ministerio sobre su solicitud de semillas de cebollas para el año siguiente.
El oficial responde diciendo que está muy bien impresionado con lo que ha visto. Pregunta cuántos agricultores están interesados en comprar semillas mediante el Ministerio, y después de tomar una cuenta tentativa, dice que no ve por qué no puede conseguirles semillas para la próxima temporada de cultivo.
Los próximos meses pasan bien lentamente para Ana. Las lluvias comienzan y se hace más difícil viajar. Los agricultores dedican la mayor parte de su energía a las cosechas tradicionales. Ana continúa obteniendo información agrícola por medio de sus visitas regulares a las fincas en el área. Pasa tiempo con las mujeres que pintan la ropa en la villa, aprendiendo su arte. Ana se toma una corta vacación para visitar a algunos amigos en otra parte del país.
Dos o tres meses antes de que terminen las lluvias, Ana habla con su supervisor sobre la compra de semillas de cebolla. El le dice que el Ministerio no tiene los fondos suficientes para poner el depósito con la compañía de semillas, pero que él puede ordenarlas si obtiene por adelantado la mitad del dinero de los agricultores que piensan comprar la semilla. Ana no habla anticipado esta dificultad, y regresa a su lugar para hablar con Abdul y los líderes de la villa. Se llama a asamblea y se le informa al resto de los agricultores de cebollas. Alguien dice que el oficial del Ministerio está tratando de tomar ventaja de ellos robándole su dinero. Otros agricultores dicen que ellos simplemente no tendrán el dinero en efectivo hasta que llegue la siega para comprar la semilla. Por último, algunos agricultores tienen que pedir dinero prestado de sus familiares y cinco o seis agricultores deciden no continuar en este esfuerzo debido a que desconfian.
Las siguientes semanas son muy desagradables para Ana. Ella y Abdul se ven bien presionados por los habitantes de la villa a medida que se acerca la temporada seca y la semilla no llega. Se lleva a cabo una reunión para recoger el dinero que falta para la compra. De nuevo, dos o tres agricultores no tienen el efectivo. Le piden a Ana que les extienda un préstamo pequeño, pero ella decide permanecer firme y ellos se ven obligados a obtener el efectivo en otra parte.
Las semillas se compran a un precio cerca de 20 por ciento más bajo que el de los comerciantes y muchos agricultores pueden adquirir cantidades más grandes que las que acostumbraban. Ana y Abdul continúan trabajando con los agricultores con sus prácticas de cultivo y la cosecha es muy buena. Algunos agricultores alquilan un camión por un día para transportar sus sacos de cebollas para venderlas en la capital. Otros almacenan sus productos para venderlos en las villas cercanas. Mientras tanto, para uso futuro, Ana mantiene registros precisos de los productos, de técnicas de secar y almacenar, y de los nombres de las personas envueltas en los esfuerzos mercantiles cooperativos.
Las lluvias regresan y un poco después Ana termina su servicio con el Cuerpo de Paz. A ella le sigue un voluntario que está particularmente interesado en el desarrollo cooperativo. Este voluntario nunca llega a establecer la misma relación que tenía Ana con el supervisor del Ministerio, y el oficial no está dispuesto a hacer un esfuerzo especial para ordenar la semilla temprano para los agricultores. Por lo tanto, aunque continuan su esfuerzo mercantil cooperativo con las cebollas y otros vegetales, los agricultores en la villa dondo vivía Ana se ven obligados a comprar la semilla otra vez de los vendedores viajeros.
Segundo Caso Demostrativo
Tony es un agente de extensión del Cuerpo de Paz en una villa que nunca antes había tenido un Voluntario del Cuerpo de Paz. El programa al que es asignado se considera como un programa de desarrollo rural. Es relativamente nuevo -- lleva solamente tres años y está solamente comenzando a aislar las necesidades más apremiantes de la población rural en el país anfitrión.
Su adiestramiento consiste básicamente de un grupo de nuevas técnicas diseñadas por las estaciones experimentales gubernamentales como el componente central en un programa intensivo del Ministerio de Agricultura para mejorar en forma dramática la producción de maíz. El grupo de técnicas incluye: técnicas de preparación de la tierra, introducción de variedades híbridas de semillas, varios métodos de sembrar, mejorados y diferentes; recomendaciones para el espaciamiento y el desyerbo oportuno de las cosechas, uso de fertilizantes químicos y el uso controlado de pesticidas. La construcción de pozos de agua y de letrinas, y el mercadeo cooperativo recibieron énfasis secundario en el curso de adiestramiento.
Tony llega a su lugar acompañado por su supervisor en un vehículo del Ministerio de Agricultura. Después de conocer al alcalde del pueblo y a varios de sus ayudantes, Tony descubre que, hasta el momento, todavía no se ha designado un lugar para que él se quede en la villa. Hay un poco de conmoción y discusión que Tony no entiende. Se envía por varios propietarios de tierras en el pueblo y el supervisor del Ministerio trata de negociar algunos arreglos.
Finalmente, todos van a una parte del pueblo a mirar una casa que se ha designado para Tony. La casa no ha sido terminada aún. Le faltan puertas y ventanas, el piso de cemento y la letrina. Aún así, parece grande y suficientemente cómoda para satisfacer las necesidades de Tony. Se prepara un acuerdo de alquiler y se decide que Tony será el huésped del alcalde hasta que se termine de construir la casa.
Tony termina pasando el primer mes y medio en dos cuartos adyacentes en una de las casas del alcalde mientras espera que se termine el trabajo en su casa. Tony decidió contribuir parte de su propio dinero para comprar los materiales necesarios para proceder con la construcción. Sucedió también que el hombre que estaba cavando la letrina se enfermó por varios días. Finalmente, se completó la casa, excepto por los pestillos en las ventanas, y Tony se pudo mudar.
Tony cree que estas primeras seis semanas son muy frustrantes. Encuentra que le ha dedicado muchísimo tiempo y energía a motivar a la gente para que continúen trabajando en su casa. Por lo tanto, no tiene la oportunidad de visitar la villa y conocer bien a los agricultores. Se acerca la temporada de sembrar maíz, y Tony solamente ha logrado muy pocos contactos con personas que podrían estar interesadas en intentar las nuevas técnicas que él aprendió en su adiestramiento.
Para recobrar el tiempo perdido, Tony consulta con el alcalde sobre la posibilidad de una reunión de agricultores. El propósito de dicha reunión sería de que Tony se pudiera presentar formalmente y describirle a los agricultores algunas de las nuevas técnicas agrícolas que él vino a fomentar en el área. El alcalde accede a reunir a los agricultores dentro de tres noches.
En la reunión, Tony explica brevemente de dónde vino y que fue enviado a la villa para trabajar con los agricultores. Le dice a los agricultores presentes que tiene un adiestramiento especial en la producción de maíz y que si alguno de ellos está interesado, él le puede demostrar métodos de cultivar maíz que le producirán más del doble de lo que están obteniendo ahora. El alcalde le pide a los agricultores que cooperen con Tony. Dice que es una oportunidad como pocas el tener a alguien de fuera que venga para ayudar al desarrollo del pueblo, y que los habitantes deben aprovechar este tipo de ayuda cuando está disponible. Antes de que termine la reunión, Tony prepara una lista de más de una docena de nombres de hombres que dicen estar interesados en las nuevas técnicas para cultivar el maíz.
En las próximas semanas, Tony se da cuenta de que la reunión sirvió de muy poco. En el grupo étnico predominante en la villa, el cultivo de maíz se hace casi exclusivamente por las mujeres, no por los hombres. La reacción en la reunión fue aparentemente motivada por el discurso del alcalde. Tony se da cuenta de ésto después de varios intentos infructuosos para reunirse con los hombres que habían asistido a la reunión para discutir los planes para la próxima temporada de cosecha.
Tony prosigue en los siguientes tres o cuatro meses con sus intentos de fomentar los métodos mejorados de producción de maíz a las mujeres agricultoras, a pesar de enfrentar varias dificultades. La primera dificultad es la barrera del lenguaje. La mayor parte de los hombres en la villa hablan un dialecto usado en todo el país en la comunicación entre los grupos étnicos. Tony aprendió este dialecto en su adiestramiento. La mayoría de las mujeres no han viajado tanto como los hombres, y por consecuencia solamente hablan un dialecto local Tony se ve obligado a comunicarse con ellas mediante dos mujeres que pueden hablar el dialecto general hasta que él puede aprender el dialecto local. Esto es un proceso muy lento.
Otro problema relacionado con los géneros en la villa es que casi todas las empresas que generan ingresos - trabajos de servicio gubernamental y demás - están controladas por los hombres. Por lo general, las mujeres agricultoras no tienen el capital para invertir en las semillas, productos químicos agrícolas y requisitos laborales necesarios para el grupo de técnicas que Tony quiere fomentar. Esto restringe aún más el esfuerzo.
La dificultad final es simplemente una falta de confianza. Los agricultores sencillamente no creen lo que Tony dice sobre los posibles frutos que se pueden obtener al adoptar las nuevas técnicas que él está recomendando. Una estación experimental a menos de 40 kilómetros de allí ha logrado resultados muy favorables en pruebas en las fincas en villas a solamente unos kilómetros del lugar, pero parece que los vecinos de Tony no estarán convencidos hasta que vean los resultados por sí mismos.
La consecuencia inmediata de estas dificultades es que Tony tiene que asumir drásticamente una nueva dirección de sus esfuerzos promociónales de los planes que había desarrollado originalmente para su trabajo. Su primer paso en el nuevo curso es tomar muestras de suelo de varias fincas en el área y llevarlas para examinar en la estación agrícola experimental. Esto le da la información que necesita para recomendar la variedad de semilla más adecuada a las prácticas de la finca local (por ejemplo: la falta de fertilizante químico).
Lo primero que Tony hace es solicitar cantidades de semillas para prestarle a los agricultores para su uso en pruebas de resultado en las fincas. Para cuando él tiene la semilla, ya mucha gente ha sembrado, pero un puñado de agricultores se aventuran a probar la nueva variedad. De éstas, solamente tres o cuatro se adhieren estrictamente a las instrucciones de sembrado que Tony les sugiere. Los demás prefieren las prácticas más tradicionales y que menos tiempo se toman para espacios más anchos y para poner más semillas en cada hoyo.
Uno o dos meses más tarde, el enfoque de Tony cambia a la necesidad de desyerbo oportuno en los maizales. Este consejo es o totalmente ignorado o parcialmente aceptado. Hay demasiadas demandas del tiempo de las mujeres que no les permiten efectuar un desyerbo meticuloso de las cosechas en el momento más oportuno del crecimiento de la planta.
Solamente dos mujeres tienen suficiente dinero para comprar fertilizante, aunque muchas mujeres han oído hablar del mismo y les gustaría probarlo algún día cuando pudieran costearlo. Tony trabaja con las dos mujeres para demostrarle cómo hacer el uso más eficaz de las cantidades limitadas de fertilizante que han comprado. Como con algunos de los otros esfuerzos, los efectos del uso de fertilizante se afectan por la aplicación inadecuada de otros aspectos del paquete de extensión.
Llega la siega y los resultados muestran solamente una leve mejoría comparado con los años anteriores. Nadie se decepciona demasiado y, en uno o dos casos, las ganancias son bastante obvias. Aún así, Tony se siente frustrado. Después de toda una temporada de trabajo, no parece haber muchos resultados de los esfuerzos.
Algo curioso atrae la atención de Tony. Muchas mujeres en el área viven a un nivel de subsistencia, supliendo la mayor parte de sus necesidades alimenticias con los productos que ellas mismas cultivan. Tony nota que tan pronto las mujeres han terminado su cosecha, llevan la mayor parte del grano al mercado para venderlo inmediatamente.
Tony le pregunta a algunas de las mujeres con quienes trabaja por que no retener una mayor cantidad de sus productos para su consumo personal en los meses venideros. Ellas responden que no se pueden quedar con más de uno o dos sacos de maíz porque si no perderán mucho debido a las ratas y la humedad en el almacén.
Esto es nuevo para Tony, quien decide cavilar sobre el asunto. El no ha sido adiestrado en cuanto a las técnicas eficaces de almacenamiento de granos. Por lo tanto, no se siente seguro de cómo puede ayudar a las personas a poner fin a sus problemas. Para poder educarse mejor en cuanto a qué técnicas se están utilizando en la actualidad, lleva a cabo un estudio en la finca.
Encuentra que se están utilizando diversos métodos de almacenamiento. La mayoría de los agricultores dejan el grano en la mazorca durante el almacenamiento. Las mazorcas se almacenan en cajones fuertes o se apilan en alfombras en cuartos reservados para el almacenamiento de grano. Algunos agricultores descascaran el grano de las mazorcas antes de almacenarlos en sacos de arpillera en los desvanes en sus casas. En la mayoría de los casos, la condición del grano almacenado es pobre. El maíz no se ha secado adecuadamente, parte está infestado con insectos, y hay muchísimas ratas.
Para controlar mejor el problema de almacenamiento, Tony investiga un poco más. Habla con los oficiales en la estación experimental y visita sus almacenes. Estos resultan ser bastante impresionantes, pero no parecen ser bien adecuados a la situación encarada por la mayoría de los agricultores con quienes Tony trabaja.
Tony también viaja a la ciudad capital para verificar ciertos asuntos en el centro de recursos del Cuerpo de Paz. Allí encuentra dos o tres trabajos de referencia sobre tecnologías intermedias de almacenamiento. Copia varios diseños de silos y de graneros y luego regresa a la villa.
Continúa observando las condiciones de almacenamiento en los cajones en el pueblo. Convence a dos agricultores de que su maíz necesita ser secado más al sol antes de almacenarse. Habla con otros que tienen un gran problema con las ratas. La mayoría dice que no hay nada que puedan hacer.
Aún mientras está haciendo las rondas, Tony comienza a experimentar con algunos diseños nuevos de almacenaje para determinar si son factibles cuando se construyan con materiales locales. Un vecino le ayuda a encontrar bejucos y ciertos tipos de cortezas que se pueden usar para unir secciones de bambú. Sin embargo, Juntos encuentran que las ataduras sugeridas en los planes de Tony no funcionan bien con algunas de las estructuras más altas. Probando, descubren un buen
Juntos preparan un grupo de modelos a escala que Tony usa para hablar con los agricultores sobre el problema de almacenamiento. Los agricultores que han estado teniendo las mayores dificultades con el almacenamiento ofrecen sugerencias en cuanto a cómo satisfacer sus necesidades particulares. Los que han logrado éxito al almacenar sus cosechas ofrecen sugerencias para mejorar los diseños. La mayor parte de la atención en las discusiones entre Tony y los agricultores se le presta a los recursos para el control de ratas - - cigoñuelas y placas de metal para evitar que las ratas puedan roer una entrada a los graneros y cajones. Dos o tres de los diseños parecen contar con gran aprobación de los agricultores que estudian los modelos a escala. Tony construye estos modelos a tamaño real, con la ayuda de su vecino, y los llena con grano para ver cuán bien funcionan para mantener el maíz seco y lejos del alcanza de las ratas.
Para cuando se han construido por completo, la "temporada de hambreo se va acercando y la gente comienza a preocuparse sobre si el grano del año anterior durará hasta la próxima cosecha. Tony estima que éste es el mejor momento para demostrar las técnicas mejoradas de almacenamiento que él ha estado probando.
Para preparar la demostración, Tony visita a cada uno de los agricultores con quienes mantuvo contactos en los meses pasados y coteja con ellos la condición actual del maíz en sus almacenes. A muchos no le quedan muchos almacenes; la mayoría tienen problemas con ratas; varios han sufrido pérdidas debido a la humedad y los insectos. Tony habla con ellos sobre los nuevos cajones que ha construido y dice que está planeando presentar una demostración de su eficacia a los agricultores que puedan estar interesados en construir uno ellos mismos.
La primera ronda de contactos le da a Tony una idea de cuánta gente está verdaderamente interesada en las nuevas técnicas de almacenamiento. Tony se comunica con cada uno de los agricultores que hayan mostrado interés por segunda vez para sugerir dos o tres fechas alternas para la presentación. El concenso general es esperar ocho días hasta que pase una festividad religiosa especial y entonces dar la demostración temprano al caer la tarde después de que las mujeres hayan terminado de recoger.
Al preparar la demostración, Tony se esfuerza por tener en cuenta varias cosas. Sabe que los agricultores están muy cocientes de los problemas de almacenamiento debido a su ansiedad en cuanto a la temporada que se avecina, y quiere aprovechar su interés en mejorar la forma en que almacenan sus cosechas. Sabe también que los agricultores entenderán mejor y aceptarán consejos de sus colegas mejor que de él, así que quiere que un vecino le ayude con la presentación. Finalmente, trata de pensar en formas para envolver activamente a los agricultores en lo que dice y hace durante la demostración. Tony cree que cuando los agricultores vean y experimenten cuán fácil es construir un cajón bien diseñado y entiendan lo bien que trabaja (los cajones de almacenamiento de Tony prácticamente no tienen ratas), optarán por construir uno ellos mismos. El vecino de Tony está dispuesto a ayudar con la demostración. Los dos se sientan y juntos preparan un plan para la presentación que incluye los siguientes pasos;
1. Estimular el interés de la audiencia pasando maíz dañado por las ratas;
2. Señalar los requisitos esenciales de un cajón de almacenamiento eficaz;
3. Evaluar los métodos de almacenamiento comúnmente practicados en las villas;
4. Explicar y comparar los nuevos diseños de los graneros;
5. Contestar preguntas;
6. Pedir voluntarios en la audiencia que le ayuden a demostrar los métodos de construcción;
7. Repetir pasas, si es necesario;
8. Contestar preguntas;
9. Resumir y ofrecer seguimiento.
Decida quién ha de asumir qué papel durante las diferentes partes de la demostración, reúnen los materiales - maleza y bambú adicional - que han de necesitar y ensayan juntos varias veces la secuencia de las actividades para asegurarse de que todo irá bien.
Dos días antes de la fecha señalada, Tony visita a todos los agricultores que mostraron interés en asistir a la reunión para recordarles de la hora y el lugar de la misma. El día de la reunión, Tony coloca los materiales donde estén a la mano durante la presentación. Piensa sobre dónde se pararán las quince o veinte personas para que puedan ver y escuchar las presentación. Coteja con su co-demostrador sobre algunas ideas finales para evitar dificultades inesperadas.
La mayoría de las mujeres que Tony esperaba vienen a la demostración. Como media docena de hombres asisten también. La demostración se lleva a cabo y Tony y su vecino pasan como media hora contestando preguntas muy particulares sobre el tiempo necesario para construir el cajón, técnicas de construcción y resultados en cuanto a la protección contra ratas. Uno o dos agricultores permanecen escépticos de la cantidad de labor envuelta, y otro duda que los nuevos diseños de cajón serán lo suficientemente seguros para evitar que los ladrones entren y roben el grano. El resto de los agricultores muestra gran interés en que Tony les ayude a construir uno u otro de los diseños para su propio uso. La discusión al finalizar el día enfoca el tiempo más adecuado para comenzar a construir los nuevos cajones. La mayoría piensa que será mejor esperar hasta que todas las cosechas se hayan sembrado y haya más tiempo disponible para dedicarle a las labores de construcción.
Las lluvias comienzan y otra vez Tony trabaja con los agricultores en cuanto a sus métodos de siembra, enfatizando que menos semillas por colina disminuirá muchos de los efectos negativos de aglomeración que experimentaron los agricultores el año anterior.
Cuando se termina la siembra, Tony se prepara para darle seguimiento a sus esfuerzos de fomentar los nuevos diseños de cajones de almacenamiento. En la demostración, más de diez agricultores indicaron que les gustaría tratar de construir graneros a prueba de ratas. Para cuando todas las cosechas se hablan sembrado, solamente seis agricultores estaban interesados. Tony ayuda a cada uno durante los siguientes dos o tres meses a construir su propia facilidad.
Llega la próxima siega y los nuevos cajones han de rendir su servicio. Los agricultores están muy contentos con su funcionamiento. Aún hay un poco de daño debido a las ratas, pero nada comparado con los años anteriores. También, el maíz en los cajones se seca mucho mejor. De hecho, el único problema que queda es que un porciento de la cosecha se pierde todavía debido a los gorgojos.
Al final de su informe de servicio, Tony detalla los pasos que siguió y el progreso logrado en su lugar con la introducción de la nueva tecnología de almacenamiento. También ennumera los problemas que encontró y las medidas que tomó para satisfacer las necesidades del grupo étnico con el que trabajó fomentando la producción de maíz. Recomienda que su sucesor se interese en problemas de almacenamiento, y que conozca bien el uso de medidas para el control de alimañas adecuadas para los problemas de insectos que continúan afrontando los agricultores en sus nuevas facilidades de almacenamiento.